Lionel Messi no para de vacacionar. A las minivacaciones en Río de Janeiro se le sumaron unos días en las playas mexicanas junto a su novia Antonella Racuzzo. El crack, claro está, también tuvo tiempo para la solidaridad, como un partido amistoso en Panamá y otro en Brasil. Además, se hizo lugar para visitar Haití, como embajador de UNICEF.
Antes de retornar a Barcelona para una nueva y exigente temporada europea, Lionel está aprovechando sus últimos días en la Riviera Maya. Allí está haciendo un recorrido por varias de las mejores playas del Atlántico.
Messi, que acostumbra a recibir un coctel de críticas y elogios en cantidades similares, está totalmente desenchufado y sacándole el juego a los pocos días de descanso que le deja el futbol.
fuente: adictoalatv
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